Actually...

Hace poco más de tres meses me mudé. Cuando me preguntan si extraño, la respuesta es "más o menos" y en realidad lo digo no creyéndolo del todo, más bien para no quedar como una desalmada. Honestamente, no creía extrañar en absoluto, quizás sólo algunas cosas particulares que tampoco me quitaban el sueño. Era simplemente una mezcla de añoranza y nostalgita.
Este fin de semana pasé dos días en mi casa de allá, me reencontré con todos los hábitos de mi mamá, sus tics, sus manías, sus chistes, sus rompimientos de paciencia, sus defectos, su total entrega y todo lo bueno que la caracteriza. Ella cada vez que viaja en auto de noche se duerme. Ayer, volviendo a mi casa actual en el auto de mi papá, a los quince minutos de haber salido ya estaba dormida. Esa pavada me dio mucha ternura y me hizo darme cuenta de lo mucho que la extraño.