jueves, mayo 05, 2005

La margarita dijo no

Supongamos que tengo una flor en la mano. Tiene 6 pétalos. O mejor dicho, tenía 6 pétalos. Eran 6 pétalos de oro. Muy unidos. Vivieron cosas increíbles. Tenían un vínculo de dependencia tal, que cada pétalo necesitaba del otro para subsistir. Se divertían horrores. Si uno estaba triste los otros 5 pétalos lo abrazaban, en cambio, si uno sonreía bastaba un segundo para que el resto se contagiara. Y cada uno se destacaba por algo en particular.
Uno representaba la madurez, la experiencia. También la soberbia, la desfachatez. A veces se tornaba insoportable e incomodaba para los otros pétalos, pero a lo largo de los años intentaron aprender a vivir con eso. Otro pétalo representaba el dinamismo, la hiperactividad. Pero también la falta de conciencia y la incapacidad de saber priorizar ciertos valores fundamentales. Si le preguntaban a cualquier otro pétalo si se imaginaban el desenlace de este pétalo, a ninguno se le hubiera siquiera cruzado. El tercero le otorgaba el glamour, el brillo y la finura a la flor. Pero siempre se caracterizó por sus ausencias significativas y su falta de compromiso. Es un pétalo que a pesar de todo, te compra y es imposible no quererlo, quizá es por eso que duele más su actitud. El cuarto pétalo le daba el toque de sencillez necesario en cada flor, la inocencia, la pureza. Pero era un pétalo ciclotímico, un poco egoísta y díficil de lidiar. De repente era pura alegría y al rato los otros pétalos ni se podían asomar. Cambiaba de humor constantemente. Y toda esa inocencia que lo caracterizaba le jugaba en contra y lo llevaba a cometer estupideces que terminaban no siendo simplemente estupideces. El quinto, en cambio, parecía el pétalo más descomprometido, el más desinteresado, el menos jugado, el más débil. Pero con el tiempo les fue demostrando a cada pétalo su garra, su fuerza y su incondicionalidad. Es un pétalo encantador, que tiene, sin embargo, sus rayes y defectos. Lo más importante de este pétalo es que es un pétalo fiel. Y la fidelidad no es algo fácil de encontrar en un jardín. Por último, está el sexto pétalo. Un pétalo que está siempre alegre, es versatil, con picardía pero de la buena. Es irónico, sarcástico y le gusta jugar mucho con las palabras sin dejar de ser consciente de que a veces se extralimita y lastima con ellas. Es optimista pero extremadamente vago, muy inseguro y medio tímido. Es muy introvertido y cerrado, lo que implica que pocas veces le ha permitido a los otros pétalos penetrar la coraza y llegar profundo. Pero por sobretodo es un pétalo que teme que el lazo que lo une al único otro pétalo que queda se vaya, como los otros cuatro pétalos, desgarrando. Realmente teme.


Por qué nunca me cuestioné acerca de la raíz de esta flor?

2 comentarios:

Angelina 2.0 dijo...

Lindo, lindísimo.
Love you.

Psicodélica star dijo...

Linda la redacción. Pero te aseguro que a lo que hace alusión...va para atrás.
Love you too my friend.